La biblioteca es una gran aliado cuando los bolsillos escasean y los precios de los libros de fotografía, en muchos casos, no son tan accesibles, por no decir caros.
Durante este tórrido verano empordanès, mi casa está repleta de libros de fotografía prestados y de lo más variado. Desde Annie Leibovitz, pasando por Elliot Erwitt, Ed Van der Ersken, Alberto Korda, Ellen Auerbach y otros.
Pero de todos ellos, hay uno que quiero destacar especialmente y si me permiten, explayarme un poco. Ya que creo que es imprescindible para entender una evolución y en este caso de la fotografía en color. Y por otro lado, ignoro la existencia de otros libros en castellano sobre este tema (si alguien conoce otros, me encantaría saberlo). Eso lo hace más que recomendable.
Se trata de Cien años de fotografía en color. Del autocromo al Digital. La autora es Pamela Roberts y lo editó Electa acertadamente en el 2007. Ya que un siglo antes, los hermanos Lumiére lanzaron oficialmente el primer proceso de color: el autocromo a un mercado impaciente. Y empezó la puja, el eterno debate (que no acabó aún) entre el blanco y negro y el color.
El blanco y negro fue siempre un aliado del fotoperiodismo y de la fotografía social o documental. Aunque en las últimas décadas muchos se han pasado al color debido a su desarrollo y estética. Maestros de la fotografía como Ernst Haas, Saul Leiter, Tony Ray-Jones, Steve McCurry , entre otros, han utilizado el color de una manera satisfactoria y han jerarquizado su uso. Aunque cabe reflexionar, hoy en día, si el color digital vulgariza la expresión fotográfica en el mal uso o manipulación en exceso con programas como PhotoShop y otros programas informáticos.
Saul Leiter – 1957 |
Alburquerque – Nueva México. Ernst Hass 1969 |
Snowy Far – Tony Ray – Jones 1970
Jodphur – India- Steve McCurry |
El libro, con más de 300 imágenes, en muchos casos, claves para entender la evolución del color, abre las puertas para una exhaustiva descripción histórica de las técnicas que se usaron desde un principio. Y también narra cómo se insertó el color en revistas, publicidades de época.
En este sentido, se describe la irrupción, en 1925, de la diapositiva Kodachrome de 35 mm como un punto de inflexión y que agilizó poco a poco el uso del color para cualquier fotógrafo aficionado. Aunque el blanco y negro seguía siendo el camino para los fotógrafos profesionales; tuvieron que pasar muchos años más , mediados de la década del cincuenta, cuando empezó su verdadera madurez y aceptación.
Luego de varios capítulos de útil información histórica; en la página 184 la autora reflexiona de una manera crucial sobre la dicotomía del color y el blanco y negro: “ en 1989, se celebró el 150 aniversario de la invención de la fotografía, un acontecimiento festejado en todos los museos del mundo. Pero casi ninguna de las principales exposiciones retrospectivas, con sus correspondientes catálogos voluminosos, recogió muchas fotografías en color…realizadas en las ocho décadas intermedias, a pesar que el color ya estaba presente en más de la mitad de esos 150 años”. Toda una declaración de principios de Pamela Roberts.
En síntesis, vale la pena adentrarse en sus 257 páginas aunque sea como préstamo bibliotecario y, muy a pesar del último capítulo, dedicado a lo digital y que es bastante inconsistente y discutible en cuanto a contenido o selección de imágenes.
Está claro que el color estaba reservado para trabajos personales, para los profesionale era obligada la película b&n por eso se valora más a tipos como Haas que era casi el único en plantilla de Magnum disparando en color o sobretodo el trabajo de los fotógrafos "desconocidos" de la FSA. Normalmente cuando hablamos de FSA nos viene a la cabeza el b&n de Dorotea Lange o de Walker Evans.
Gracias por la referencia, tomo nota.
Excelente libro, sí señor. Entre tanto libro de historia de la fotografía que habla siempre de los mismos autores en blanco y negro, está bien que exista uno con otro enfoque.
Hola Pedro!!… resulta paradójico pensar que Walker Evans al final de su vida empezó a utilizar cámaras polaroid (1974) porque estaba encantado con las gamas de color que ese formato le brindaba.
Sí, Oscar. Casi no hay libros como éste y resultó ser muy bueno y explicativo y como tu dices con otro enfoque. espero conocer más libros que hablen sobre el color. Un abrazo!!